Todos deberíamos tener en nuestras vidas algún momento en
que perdiéramos todo, por muy duro que suene. Después de eso se renace como el
ave fénix... Y se le da sentido e importancia a todo. A mi me ocurrió siendo
muy joven y ese es el motivo de ser tan agradecida a la vida. Tan feliz con las
pequeñas cosas. Y darle a cada cosa la importancia que realmente tiene. Por
todo ello agradezco infinito todo lo que perdí porque a partir de ahí aprendí a
valorar!!! Lu.